La selección de erratas y rectificaciones del año en los medios de comunicación que ofrece el blog Regret the Error comienza con una historia ya muy conocida: la confusión entre Obama/Osama que alcanzó una orgía de despropósitos en EEUU tras la muerte del líder de Al Qaeda.
También aparece un caso terrible de la prensa británica, no sólo los tabloides, que se embarcó en la persecución de un hombre llamado Christopher Jefferies, detenido por el asesinato de una joven y puesto después en libertad sin cargos. Jefferies, casero de la joven, era un tipo normal, quizá de vida algo extravagante como les ocurre a muchas personas, que fue acusado sin pruebas por la prensa. El caso acabó con el pago de indemnizaciones por el daño acusado, pero lo que quedó fue un ejemplo más de cómo la prensa, como una jauría, puede llegar a destrozar la vida de un hombre.
Pero lo más divertido de la selección que hace Regret the Error son siempre los errores absurdos y demenciales, de los que hay unos cuantos. Mi favorito es una imagen.
Creo que esa no es la hoja que aparece en la bandera de Canadá.
Por no hablar de lo que cuesta perder una ‘l’ en el titular. Clock (reloj) pasa a ser cock (polla).
No importa lo serio y prestigioso que sea un periódico. Las leyendas urbanas tienen una habilidad especial para colarse en sus páginas. En el NYT:
An article on Jan. 16 about drilling for oil off the coast of Angola erroneously reported a story about cows falling from planes, as an example of risks in any engineering endeavor. No cows, smuggled or otherwise, ever fell from a plane into a Japanese fishing rig. The story is an urban legend, and versions of it have been reported in Scotland, Germany, Russia and other locations.
Si leen un artículo sobre vacas que caen de aviones, desconfíen.
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En Guerra Eterna: aquí la selección de 2010 y aquí la de 2009 (con los enlaces de años anteriores).
