Los republicanos afirman que cuanto más lejos esté el Gobierno norteamericano de influir en la economía del país, mejor. Uno de sus candidatos, ahora en alza tras su casi-victoria en Iowa, es de la misma idea, excepto si puede pillar fondos públicos para su circunscripción, pero hay una habitación del hogar en la que quiere imponer unos determinados comportamientos: el dormitorio.
«Una de las cosas de las que hablaré (dijo en octubre) es de los peligros de los anticonceptivos en este país. (…) Muchos cristianos dicen que está bien, que la contracepción está bien. No está bien. Es una licencia para hacer cosas en la vida sexual que van en contra de lo que deberían ser las cosas».
Santorum es padre de siete hijos. Está claro que, como católico, no acepta el sexo más que como una forma de tener hijos. Por eso, se opone a una decisión del Tribunal Supremo en 1965 que anuló una norma de Connecticut que prohibía facilitar medios anticonceptivos a parejas casadas. Al igual que los talibanes, Santorum cree que el Gobierno tiene derecho a imponer su moral religiosa sobre los ciudadanos.
Interferir en la vida económica es pecado. Hacerlo en la vida sexual es lo correcto.
Hacer un ranking de las mejores frases de Santorum es una disciplina sencilla. Hay mucho donde elegir. ¿Matrimonio gay? Una afrenta a la sociedad y una amenaza para el Ejército porque los soldados homosexuales ¡se duchan! con sus compañeros. ¿Un sistema público de salud o una reforma como la aprobada por Obama? Santorum tiene una hija discapacitada. Sostiene que no habría sobrevivido en un país con una «sanidad socializada» (es decir, países como España, Alemania o Francia).
Aquí hay un ‘top ten’ de Santorum. Aquí otro.
Mi frase favorita:
«Mientras los hobbits ascendían el Monte del Destino, el ojo de Mordor miraba a otro sitio. Ahora mira a Irak. ¿Saben qué? Quiero que siga mirando a Irak. No quiero que el ojo vuelva a mirar a Estados Unidos».
Un presidente que explica la política como si fuera una escena de ‘El señor de los anillos’. Eso es lo que necesitamos para estar más cerca del Apocalipsis. Eso sí, sin anticonceptivos.
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11.30
Este anuncio de la campaña de Rick Perry contra Santorum tiene que ver con lo que decía sobre los fondos públicos que el Congreso aprueba para ciertos proyectos (‘earmarks’), sobre todo de infraestructuras, en las circunscripciones de los congresistas. Lo de los cerdos viene de ‘pork barrel’, el término con el que se describe el uso de gasto público para complacer los deseos de los legisladores. A veces, esos proyectos tienen sentido económico. En muchas ocasiones, sólo es una forma de que el congresista se asegure la reelección.
Perry lanza esta acusación contra Santorum porque el ex senador de Pennsylvania, por muy conservador que sea, es tan adicto a estas iniciativas, sinónimo de despilfarro en el gasto público, como los demás congresistas.
Si este elemento llega a la Casa Blanca que no nos pase na