Cuatro marines norteamericanos orinan sobre los cadáveres de tres talibanes en algún lugar de Afganistán. Se desconoce el origen del vídeo, aunque las primeras reacciones dan por hecho que no se trata de un montaje. Tanto el Pentágono como los marines han dicho que el asunto será investigado y que las imágenes son deplorables. Volverán los comentarios sobre las manzanas podridas y habrá que unir este vídeo a una larga lista de pruebas que, de forma muy caritativa, se presentará como ejemplo de la deshumanización de la guerra y sus efectos en sanos y robustos jóvenes estadounidenses que no osarían hacer algo así en cualquier otra situación.
Todo muy parecido a los crímenes del llamado ‘Kill Team’, que convirtió el asesinato de civiles afganos en una competición deportiva. Si eliminar civiles termina siendo una consecuencia inevitable de la guerra, profanar los cuerpos del enemigo pasa a ser una simple excentricidad. Esos cadáveres también pueden servir como instrumento de guerra psicológica con la intención de provocar a los talibanes para que salgan de su escondite. La guerra lo digiere todo.
No hay ninguna posibilidad de justificar estos hechos, como por el contrario sí se hace cuando una operación militar acaba con la muerte de nueve niños que estaban buscando madera. En esos casos, se lamenta que se haya producido un «accidente», como si fuera un acontecimiento imposible de evitar.
No importa que se produzca una y otra vez. Nunca hay que descartar el error humano. En realidad, cuando matan a decenas de personas sólo porque los talibanes han robado un par de camiones ya puedes imaginar que no hay ningún límite en el uso de la fuerza. Civiles y combatientes forman parte del paisaje. El que dispara no asume ninguna responsabilidad. «No tenemos gente al este de nuestra posición, así que pueden disparar». Hay libertad absoluta para abrir fuego. Ya buscaremos después alguna forma de justificar la matanza.
Ante ese panorama, ¿cuál es la diferencia entre accidente y aberración?
Amigo: La guerra es una situación aberrante, toda demostración de fuerza lo es, y esa guerra en específico comenzó mal; quizás sus principios fueran justos, pero desde que entró Irak en el panorama, ya todo quedó distorsionado. Quedaría una posibilidad de salvar the whole shit [la guerra], si castigaran ejemplarmente a los implicados, con una exoneración excepcional al que sostuvo la cámara; pero todo eso es un análisis demasiado sofisticado para the whole shit.
Aberración?
Situación soñada para cualquier enfermo: todo un país convertido en «zona de fuego libre». Si todo el personal identificado y «friendly forces» despejaron el área, entonces todo en orden. Si se mueve, da lo mismo que esté ordeñando una cabra o que opere un mortero. Maravilloso. Además, cualquiera confunde un palo con un mortero en un país extranjero con una cultura distinta.