Guerra Eterna

Que absurdez.

Gracias a Dios, las noticias son las malas, porque lo malo es lo extraño.

Dar como noticia que un avión ha aterrizado bien, considerando la de ellos que aterrizan bien, es como notificar que la Tierra da vueltas alrededor del Sol o que un hombre de 60 años ha estornudado en la calle del tal.

Lo vergonzante es que las televisiones y otros medios de comunicación tradicionales NO INFORMAN de lo que realmente sucede en IRAQ. Sólo emiten los packs que les envían las agencias, y poco más. ¿Eso es profesionalidad periodística?

Lo que más me INDIGNA no es lo anterior, sino la AUSENCIA de COBERTURA de otros conflictos bélicos, como los africanos. La doble vara de medir.

Cuando les interesa a las agencias norteamericanas, sí que hay información. Pero ¿qué hacen los medios españoles? Pues NADA, o casi nada. Patético.

¿Dónde están los Manu Leguineche, De la Cuadra Salcedo, Pérez-Reverte + Márquez, Alfonso Rojo?

Esa es la realidad, la cruda realidad. Los periodistas "profesionales" españoles se limitan a analizar/examinar/reproducir desde España la información que les llega. No, se limitan a despotricar sobre lo publicado/emitido en los medios anglos y poco más.

En IRAQ hay peligro, ¿no lo hubo en Vietnam?

Dejando de lado los conflictos, ¿y el periodismo de INVESTIGACION? me refiero a NACIONAL.

Brilla por su ausencia, salvo casos muy contados.

Con ese panorama ¿para qué queremos periodistas profesionales? Con simples locutores y presentadores es más que suficiente.

Fijémonos en los medios gratuitos y los locales, se nutren básicamente de agencias, incapaces de generar sus propios contenidos.

En la red, Periodista Digital, que tras la nueva legislación ha dejado de COPIAR SISTEMATICAMENTE. ¿Qué ofreece? Información de Agencias, REFRITOS.

Mal veo a la profesión, muy mal. Y a peor.

Todo es básicamente por una causa: LA OBTENCION DE BENEFICIOS. De ahí la precariedad laboral y la consiguiente bajada de calidad en los contenidos.

Si quitamos la OPINION, poco queda de interés noticiable en los medios escritos.

¿La solución? La desconozco, tampoco es de mi incumbencia. Si los periodistas no se organizan de una vez y reclaman el cambio de las condiciones laborales (el verdadero quid) los demás no lo van a hacer por ellos.

Releyendo compruebo que he estado muy duro. Perdonandme, mi intención no es provocar (aunque lo parece, lo admito).

Si los medios no fiscalizan a los poderesos, mal servicio prestarán a la sociedad. Y eso me duele, porque estoy harto de tanto "pasotismo" social ante tantas actuaciones injustas, me enerva.

Ayer intentaron agredir a Pío Moa (no entro sobre su valía) en una universiad española. ¿Eco en los medios?

Cuando meses atrás irrumpieron unos energúmenos en la UAB (Arcadi Espada, Francesc de Carreras,... ) otro tanto. Bueno no, l'Avui i El País Catalunya (guardo el artículo) trataron a los agredidos como fascistas. Al menos se hicieron eco, manipulando como es tristemente habitual. Pero con la agresión anterior sólo he encontrado SILENCIO. ¿Por qué?

En ambos casos estamos ante un ataque a la LIBERTAD DE EXPRESION, derecho reconocido.

De ahí mi indignación, que reflejé en mi primera anotación.

Repito: disculpadme.

(debe ser un efecto colateral del fondo de color rojo de la bitácora: rojo -> agresividad).

Creo que en Irak la cosa está muy complicada para ejercer el periodismo. Tal y como ocurrió en el Líbano, los secuestros de extranjeros, (periodistas o no, todos valen dinero) están a la orden del día, y no se libra ni Dios.

Tan sólo sobreviven los poquisimos profesionales con un excelente conocimiento de la zona, la lengua, etc., la mayoría de ellos son de procedencia árabe (salvando casos como el del indestructible Fisk). Que yo sepa en Vietnam esto no sucedía.

De todas formas estoy de acuerdo contigo en que ya no estamos en los tiempos aquellos de la gloriosa profesión periodística, donde un buen reportero era bien recibido por el bien que podía hacer que su reportaje saliera a la luz. Creo que en Irak, y en general en los países musulmanes, están desencantados, y ven a los periodistas como parte del mismo agresor.

Saludos