En una entrevista con el programa ’60 Minutes’ de CBS, Bashar Al Asad ha recibido favorablemente las declaraciones de John Kerry, luego matizadas por el Departamento de Estado, sobre la necesidad de reanudar el diálogo para poner fin a la guerra de Siria sin plantear de entrada la condición imposible de que dimita el máximo dirigente del país.
Asad dice que es optimista y que «si se abandona la política de aislamiento (de su Gobierno), las cosas mejorarán». El periodista le pregunta si está de acuerdo con la idea de que esta guerra no tendrá un desenlace militar. «Desde luego –responde Asad–. Todo conflicto, incluso si es una guerra, debería acabar con una solución política».
El dirigente sirio niega que su Ejército haya utilizado bombas de cloro, porque «no es un gas muy efectivo en términos militares». Sobre las ‘bombas de barril’ lanzadas desde helicópteros sobre zonas civiles, dice: «No existen las bombas de barril. Hay bombas y todas las bombas son para matar».