Los debates entre los candidatos a vicepresidente en las elecciones de EEUU son tan inútiles que su única valoración interesante consiste en buscar un momento que pueda perjudicar o avergonzar a sus jefes. Por acción u omisión. No se puede decir que el demócrata Tim Kaine y el republicano Mike Pence derrochen carisma –es posible que fueran elegidos para no hacer sombra a Clinton y Trump–, pero en su debate ofrecieron unos pocos momentos intensos.
A efectos de rentabilizar el duelo, los de Clinton consiguieron lo que querían. Pence se vio forzado a negar que fueran ciertas las palabras de Trump que Kaine le arrojaba desde el otro lado de la mesa. Para Pence, es una pena que la mayoría resultaran ciertas. La campaña de Clinton sólo tardó unas pocas horas en convertir ese regalo en un spot de propaganda.
At the #VPDebate, Mike Pence tried really, really hard to deny pretty much everything Donald Trump has said and done. Let's replay the tape: pic.twitter.com/5XNKyFX6az
— Hillary Clinton (@HillaryClinton) 5 de octubre de 2016
Por una razón u otra, la campaña de Trump no deja de ofender a los latinos. Pence lo hizo con la frase «Senator, you whipped out that Mexican thing again». That Mexican thing. Perfecto para que un debate nada memorable tuviera vida en las redes sociales.
#ThatMexicanThing is millions of Mexicans that live in this country and each one of them pay more taxes than @realDonaldTrump..
— Alberto Mercado (@albermercado) 5 de octubre de 2016
Todo eso no quiere decir que el debate arrojara una clara victoria de Kaine. A diferencia de su jefe, Pence demostró que es un político profesional que se toma en serio su trabajo y que se había preparado bien para el enfrentamiento. Qué más quisieran los republicanos que Trump hiciera lo mismo estos días para su segundo debate con Clinton el 9 de octubre.
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Más vídeos del debate Kaine-Pence.