The IMF is really pissed. #Greece pic.twitter.com/J8I35ZyPI2
— Mathieu von Rohr (@mathieuvonrohr) June 11, 2015
El equipo negociador del FMI ha abandonado Bruselas dando por terminadas (de momento) las negociaciones con Grecia. Frente a los anuncios optimistas de los últimos días procedentes de Atenas, la conclusión que se puede extraer de los comentarios del portavoz del FMI en Washington no puede ser más pesimista.
El tema de las pensiones es especialmente delicado después de que el Tribunal Supremo griego haya declarado anticonstitucionales los recortes aplicados en 2012 por imposición de la troika (no así los aprobados entre 2010 y 2012). El fallo no tiene efectos retroactivos, pero obliga al Gobierno a destinar unos 1.000 millones más de euros a las pensiones, según los primeros cálculos.
El FMI destaca que el gasto en pensiones de Grecia es muy superior a la media europea en relación al PIB. Es otra de las consecuencias del hundimiento de su economía desde 2010. Pero además el sistema griego permite la jubilación anticipada antes de los 60 años (obviamente, no con la pensión completa). Es otro efecto de la crisis, porque muchas personas se acogen a ella para tener algún ingreso cuando saben que les resultará imposible encontrar un trabajo.
Tsipras ha dicho que en los últimos cinco años, las pensiones han caído un 48% (no el gasto en pensiones), y que el 45% de los pensionistas vive bajo el umbral de la pobreza.
«Como nuestra directora ha dicho en muchas ocasiones, el FMI nunca abandona las negociaciones», ha dicho el portavoz. Claro, sólo deja que el interlocutor se ablande el tiempo suficiente como para que tenga que rendirse más tarde.