El mejor homenaje posible a Helen Thomas, fallecida esta semana, es la parodia de rueda de prensa que montó Stephen Colbert en la cena de la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca. La periodista que cubrió las noticias de diez presidentes (el primero, Kennedy) aparece como el típico malo de película que nunca pierde el rastro en la persecución del protagonista.
Y eso deben ser los periodistas en las ruedas de prensa. Respetuosos, no necesariamente agresivos, pero desde luego una auténtica pesadilla para los políticos. No es precisamente lo que ocurre por distintas razones en las ruedas de prensa posteriores al Consejo de Ministros de los viernes.
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–Foto: Helen Thomas en el despacho oval de Kennedy.
–Foto: en el despacho oval junto a otros periodistas con Johnson.
–Foto: con Obama en el día de cumpleaños de ambos.