Jeremy Clarkson, presentador estrella del inmensamente popular programa Top Gear, opina en un programa de la BBC sobre los funcionarios que han realizado una huelga este miércoles contra los recortes en las pensiones del sector público: «Tendrían que pegarles un tiro. Yo les ejecutaría delante de sus familias. ¿Cómo se atreven a declararse en huelga?»
Clarkson es un provocador nato y el humor sangrante es una pieza importante de su programa por el que cobra una cantidad cercana al millón anual de libras de una empresa pública, la misma BBC. También es un reaccionario, la caricatura del inglés xenófobo que desprecia a todos los extranjeros, como cuando tachó a todos los mexicanos de perezosos, empezando por su embajador en Londres.
No es un truco para mantenerse en los titulares o espantar a los que se ofenden con facilidad. En sus columnas en The Sunday Times, muestra la misma actitud, en este caso explicada con todo lujo de detalles.