El virólogo Christian Drosten no está preocupado sólo por la evolución actual de la pandemia, explica en una entrevista en Der Spiegel. También teme lo que ocurrirá cuando la población de mayor riesgo esté vacunada, para lo que faltan varios meses, y la posibilidad de que se levanten todas las restricciones con el fin de recuperar la actividad económica. La pandemia no va a desaparecer cuando se inmunice a los más vulnerables.
Al principio, tenía dudas sobre si la llamada variante británica era tan contagiosa como se decía. Ahora lo tiene claro después de ver las conclusiones de un estudio originado en Oxford. El principal consejero científico del Gobierno alemán en la pandemia afirma que esa cepa acaba de comenzar a extenderse en Alemania, pero que aún existe la posibilidad de frenar su avance.
Estas son sus respuestas a algunas de las preguntas:
¿Cree que la llamada estrategia Covid-Cero, el objetivo de reducir a cero el número de nuevas infecciones, es la correcta?
Sí, creo que sería posible con un esfuerzo significativo. Desde luego, el virus continuará apareciendo, como hemos visto en China y Australia. Pero sería muy importante al menos elegir como objetivo el número de cero nuevas infecciones. Fundamentalmente, porque siento un gran temor por lo que podría ocurrir en primavera y verano.
¿A qué se refiere?
Una vez que los ancianos y quizá parte de los grupos de riesgo sean vacunados, habrá una inmensa presión económica, social, política y legal para poner fin a las medidas del coronavirus. Después, un altísimo número de personas se infectará en un corto periodo de tiempo, más de los que nos podemos imaginar. No tendremos 20.000 o 30.000 casos al día, sino hasta 100.000 en las previsiones más pesimistas. Evidentemente, se tratará de jóvenes, y es menos probable que los ancianos que tengan síntomas graves, pero cuando un gran número de jóvenes se infecte, entonces las UCI se llenarán y muchas personas morirán. La diferencia es que serán jóvenes. Podemos amortiguar de alguna manera ese terrible panorama reduciendo los números (de contagios) ahora.
¿Podemos confiar en que el número de casos comience a caer en primavera cuando suban las temperaturas?
Creo que no. Tuvimos un verano relajado en 2020 porque quizá nuestros números estuvieron por debajo del umbral crítico en primavera. Pero eso ya no está ocurriendo. Me temo que será más similar a España, donde el número de casos aumentó rápidamente después de que se levantara el confinamiento, incluso aunque hacía mucho calor. En Suráfrica, donde ahora es verano, también el número de casos está en un punto muy alto.