Los liberales egipcios no quieren bajarse del tanque

Un punto de vista interesante sobre los liberales egipcios, no los dirigentes, sino la gente a la que en cierto modo se podría definir como la élite de las clases urbanas egipcias y que aparentemente ha renunciado a sus ideas al apoyar el golpe de Estado contra los Hermanos Musulmanes en Egipto:

«Dudo de que sea el único entre la gente interesada en Egipto en estar perplejo por los dramáticos cambios ocurridos en las últimas semanas entre la gente que conozco. Me refiero a la gente que solía tener puntos de vista liberales, decía creer en la democracia y las libertades normales y respetaba el trabajo de los activistas de derechos humanos. Muchas de estas personas tienen estudios, han viajado al extranjero y sabían que Egipto tiene graves problemas de gobierno desde la base: corrupción, despilfarro, nepotismo, negligencia y falta de responsabilidad. La inmensa mayoría de ellos apoyaron la revolución de 2011 contra Mubaraj y deseaban un nuevo comienzo con el que poner en práctica sus ideales y solucionar algunas de las deficiencias que eran parte del legado del Mubarak».

Jonathan Wright continúa diciendo que estas personas se han convertido en un grupo reaccionario e intolerante que apoya ciegamente al Ejército, que reclama el cierre de los medios de comunicación que ahora están en la oposición, y que rechaza indignado las críticas que llegan del exterior. «No queremos vuestra democracia», es una respuesta habitual entre ellos.

Es algo más que la visión circunstancial de una persona concreta y se puede encontrar en otros testimonios. Hay pocos más significativos que el del escritor Alaa Al Aswani, el autor de esa gran novela que es ‘El edificio Yacobián’. Siempre fue muy crítico con el régimen de Mubarak y también con la pasividad de la sociedad egipcia al aceptar de forma sumisa la conculcación de sus libertades. «La democracia es la solución» era la última frase con la que terminaba todos sus artículos.

En un relato publicado esta semana, Al Aswani pone voz a los animales del zoo de El Cairo, situado cerca de uno de los lugares donde los islamistas están acampados en protesta contra el golpe. El artículo es básicamente una petición al hombre fuerte del país, el general Al Sisi, para que acabe con esa concentración sin importar la violencia que haya que utilizar. Los animales describen cómo los islamistas torturan a la gente y mutilan los cadáveres de sus víctimas porque son «criminales» y «salvajes». Lo único que ha impedido a Al Sisi cumplir el mandato que le ha concedido el pueblo egipcio, dice el escritor a través de un babuino, es la presión de EEUU, que protege a los Hermanos Musulmanes.

Y Al Aswani acaba su reclamación de poner fin a tiro limpio a las manifestaciones islamistas con el corolario: «La democracia es la solución». Y no parece que sea un chiste.

Si este es el nivel del debate entre los liberales egipcios, no es extraño que continúen apareciendo en la prensa, de propiedad privada pero ahora partidaria del nuevo Gobierno, comparaciones de Morsi con Hitler, una campaña contra el próximo embajador de EEUU en El Cairo, al que se acusa de promover escuadrones de la muerte en Siria contra el Gobierno de Asad y otras lindezas, y ataques a Mohamed ElBaradei, que apoyó el golpe, pero que ha intentado que la crisis termine sin violencia.

Lo que en Egipto llaman ‘el Estado profundo’ –en otras palabras, las estructuras de poder del régimen de Mubarak ahora ya sin el dictador– cuenta ahora con la complicidad de muchos liberales. Están dispuestos, como Al Aswani, a acabar con las libertades para defender la democracia, una mezcla confusa que no puede acabar bien. Es difícil defender la democracia subido en la torreta de un tanque.

Foto: Flickr de Ganzeer.

Esta entrada ha sido publicada en Egipto y etiquetada como , . Guarda el enlace permanente.

2 respuestas a Los liberales egipcios no quieren bajarse del tanque

  1. mikel dijo:

    Lo que en______ llaman ‘el Estado profundo’ –en otras palabras, las estructuras de poder del régimen de_____ ahora ya sin el dictador– cuenta ahora con la complicidad de muchos liberales.
    Mira por donde…

  2. mikel dijo:

    A propósito del nuevo embajador en El Cairo:
    Efectivamente. Es un destacado discípulo de Negroponte en Iraq. Los resultados en este ¿Estado? están a la vista.
    «Lindezas» ¿Dice usted? Hay que tener un cuidao…Con algunos…

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *