El Gobierno iraquí lo vio venir e incluso así no pudo hacer nada para evitarlo. La insurgencia ha redoblado sus ataques en varias zonas del país en el comienzo del Ramadán superando con mucho las cifras de muertos del año pasado. En realidad, esa actividad armada nunca se fue, pero se mantuvo en niveles asumibles en los últimos años para lo que ha sido habitual en Irak.
Ya no se puede decir lo mismo. Según el recuento de Iraq Body Count, en 2011 hubo 4.147 muertos por la violencia, y en 2012 4.573, números que ya de por sí descartan cualquier idea de normalidad. La cifra de los primeros seis meses de 2013 es 3.175. Y la mayor cifra mensual de este año era junio (622). Es muy probable que julio sea peor, porque han muerto 450 personas en los primeros 20 días del mes.
En mitad de todo este caos, ayer ocurrió un hecho singular: una fuga masiva de la prisión de Abú Ghraib. Masiva en todo el sentido de la palabra. Más de 500 presos lograron escapar gracias a una operación que comenzó con la explosión de coches bomba para provocar una brecha en los muros exteriores de la cárcel.
El ataque ha sido responsabilidad de Al Qaeda o del Estado Islámico de Irak, el grupo yihadista que además ha unido sus fuerzas con los fundamentalistas suníes que luchan en la guerra de Siria. Ni siquiera el Gobierno iraquí sabe con exactitud a esta hora cuántos presos han huido, pero sí que entre ellos están importantes dirigentes de ambas organizaciones. Algunos llevaban años encarcelados y habían sido detenidos por fuerzas norteamericanas.
Como en años anteriores, el Ramadán ha sido el momento escogido por los insurgentes. El Gobierno era consciente de ello, y por ello el Ministerio de Interior había avisado de que estaba preparado para la «batalla del Ramadán». Parece que ni siquiera estaba en condiciones de vigilar la prisión más importante del país.
No parece que fuera por turismo, por lo que el Negroponte, artífice de los escuadrones de la muerte y alguno de sus discípulos, acudieran en su día a Bagdad…
Esta gente está toda amortizada. Ahora que en el Pentágono le han dado la puntilla a los «rebeldes» sirios (que ya no le sirven a nadie, ni al tontolculo de Erdogan), toda esta tropa la van a borrar del mapa, porque la geografía de la región no les deja mucho margen a donde ir.
Insisto en que deberíais ocuparos de Bulgaria. Va a estallar y no se le está dando la más mínima cobertura. Y va a traer consecuencias.
Dr. Pointer, ¿qué está ocurriendo en Bulgaria?
Si alguien piensa que teniendo una embajada, en Bagdad, con más de mil elementos en plantilla, les dedican a realizar informes, es que tiene que hacérselo mirar.