Un periodista de Channel 4 intentó hacer unas preguntas al príncipe Carlos sobre el contenido de sus emails a miembros del Gobierno de Tony Blair. A la asesora de la Casa Real no le fue suficiente con el típico bloqueo en movimiento, también agarró el micro hasta quedarse con la capucha.
Aunque han sido necesarios diez años de litigios judiciales, el contenido de las cartas no parece tan escandaloso como creían algunos medios. Es cierto que Charles Windsor llegó al límite con su correspondencia con algunos ministros sobre temas de su interés (medio ambiente, arquitectura…), pero es difícil considerarlo una forma de presión excesiva.
"There is little hope for the poor old albatross…" The Prince of Wales speaks truth to power: H/t @WillHeaven pic.twitter.com/y5KamoO8mx
— Tom Holland (@holland_tom) May 13, 2015
Oh, this is gold. #charlesletters pic.twitter.com/rdQ8VzEVGy
— Shashank Joshi (@shashj) May 13, 2015
Key Prince Charles letter to Blair, 8 Sept '04: anger over forces suffering with poor equipment in Iraq; pic.twitter.com/3OP8jvQ3km
— Tom Newton Dunn (@tnewtondunn) May 13, 2015
El Gobierno intentó que no se conociera el contenido de los emails porque podría comprometer su posición neutral futura como monarca. Lo que no era del todo falso. Al final, en los titulares, con independencia del éxito de sus gestiones que no está confirmado, no iba a quedar muy bien.
Farage is a snarling, thin-skinned, aggressive man who makes @UKIP look like a personality cult, says @oflynnmep pic.twitter.com/HfGZTPH1Ju
— David Jack (@DJack_Journo) Mayo 13, 2015