Un equipo de Sky News aterrizó en China pocas horas antes de que comenzara la prohibición de entrada de extranjeros. En este reportaje, se observa las medidas de seguridad antes de que subieran al avión en Seúl, durante el vuelo (con las azafatas vestidas como si estuvieran en un hospital) y a su llegada. En principio, se dirigían a Pekín, pero aterrizaron en un aeropuerto a centenares de kilómetros de su destino. Allí les hicieron la prueba del coronavirus, pero no les dejaron continuar hasta la capital. Un autobús les llevó a un hotel, donde pasarán dos semanas de cuarentena en un hotel (casi 40 libras al día incluida la comida).
No cabe duda de que las medidas son rigurosas y aparentemente efectivas. Aun así, el Gobierno tomó la decisión de prohibir los vuelos al país a extranjeros. Con independencia de cuál haya sido el número real de víctimas y el comprensible escepticismo con que son recibidas esas cifras en Europa y EEUU, es indudable que las autoridades chinas han visto directamente el impacto sanitario y económico del coronavirus y no están dispuestas a pasar otra vez por la misma situación. Da una idea aproximada sobre cómo será la vuelta a la normalidad en Europa dentro de quizá un mes o más tiempo.
Será cualquier cosa menos normalidad.